La primera carrera en transportar al apodo oficial del ‘Gran Premio’ fue el Gran Premio de L’Ofilia del Automóvil de 1906, celebrado en un circuito cerca de Le Mans. Fue, apropiadamente, ganado por un Renault de 90cv, pero el hombre que lo conducía no era uno de varios pilotos estrella franceses sino un corredor mecánico húngaro convertido en corredor. Se llamaba Ferenc Szisz.
Szisz fue un tipo genial de todos los informes, sobre todo su propia descripción de cómo ganó la carrera, que apareció en el periódico alemán algemeine Automobil-Zeitung a finales de ese año. Había nacido el 20 de septiembre de 1873 en Szeged, en las tierras bajas Theiss de Hungría entre Subotica y Timisoara. Habiendo entrenado como cerrajero, su carrera como mecánico fue interrumpido por su servicio militar con el regimiento de caballería estacionado en la frontera rusa-galiziana.